El reciente encuentro en la Ciudad de La Plata, donde los Compañeros y Compañeras Municipales de La Matanza dijimos presente junto a nuestro Secretario General, Daniel Troncoso, marca un capítulo significativo en nuestra lucha por la dignidad y el reconocimiento de derechos en el ámbito municipal.
Este acontecimiento no solo simboliza una conmemoración de la ley 14.656, que cumple diez años desde su promulgación, sino que también reafirma nuestro compromiso colectivo en la defensa de los derechos laborales de todos los trabajadores municipales de la Provincia de Buenos Aires. La ley 14.656, que establece regulaciones esenciales para la administración pública municipal en nuestra provincia, ha sido un pilar fundamental en la protección de nuestros derechos.
Es un marco legal que debe ser reconocido por todos los intendentes. La presencia de representantes de diversos gremios hermanos de toda la provincia en esta convocatoria no fue casualidad. Ellos comparten nuestro anhelo de ver concretadas las reivindicaciones salariales y laborales que han sido históricamente desatendidas.
Nos encontramos unidos en una causa común: exigir que los derechos que otorga la ley 14.656 sean reconocidos y aplicados, sin distinciones ni excepciones. Esta ley no solo garantiza aspectos fundamentales como la estabilidad laboral, sino que también propicia un marco de igualdad para todos los trabajadores, tanto activos como jubilados.
La lucha de los Compañeros y Compañeras Municipales de La Matanza, junto a gremios hermanos de toda la provincia y bajo la representación de nuestra Federación (FE.SI.MU.BO), es un testimonio vivo de nuestra determinación por alcanzar un estado de bienestar laboral que beneficie a todos.
En el décimo aniversario de la ley 14.656, renovamos nuestro compromiso de seguir adelante, de no ceder en nuestra exigencia de que cada intendente reconozca y respete los derechos que nos corresponden.
Continuaremos trabajando incansablemente por la dignidad, la igualdad y la justicia social en el ámbito municipal. La lucha continúa, y cada voz cuenta. Juntos, seguiremos construyendo el camino hacia un futuro donde nuestros derechos sean respetados y reconocidos.