A los 78 años falleció este martes 15 de septiembre el ex concejal y vecino de Ramos Mejia Carmelo Affatato. Un paro cardiorespiratorio, según informó la familia puso fin a su vida de lucha gremial y política matancera, nacional y latinoamericana.
El ex candidato a intendente de La Matanza había nacido en Nápoles, Italia, en 1942. Trabajador metalúrgico y delegado sindical tuvo una destacada y férrea actitud de defensa de sus compañeros. Por su militancia fue forzado a exiliarse y, como muchos compatriotas, fue recibido en Venezuela, donde trabajó para la Confederación Latinoamericana de Trabajadores (CLAT); en la Universidad de Trabajadores de América Latina (UTAL), como organizador en países de la región. También dirigente de la Confederación Latinoamericana de Trabajadores Minero Metalúrgicos (CLATRAMM). Además, fue miembro del Partido Popular Cristiano, y fundador del Partido Unión Vecinal de La Matanza. Desde su condición de dirigente distrital se proyectó a nivel nacional al presidir la Agrupación Germán Abdala en el Frente Grande. Por esa fuerza política fue candidato a intendente y luego concejalía entre 1995 y 1999.
Cercano al pensamiento del peronismo, se sumó al PJ local.
La lucha obrera
Carmelo Affatato, como referente sindical, participó del largo conflicto de 1974 en la metalúrgica autopartista Martín Amato. En esa ocasión fue detenido en la comisaría de San Justo. La medida generó un repudio masivo con una marcha de trabajadores a la sede policial. A esa protesta se sumaron los pedidos de excarcelación de diputados del partido Popular Cristiano, que integraba el FREJULI. Entre ellos su amigo Carlos Auyero; el legislador bonaerense Alberto Aramouni y el presidente del Senado de entonces Josè Allende. Por el radicalismo se solidarizó el diputado Juan Carlos Pugliese.
Tiempo despúes, Carmelo Affatato debió atravesar su hora más difícil.
El 24 marzo de 1976 se produce el Golpe de Estado en la Argentina.
Una patrulla militar lo fue a buscar a su domicilio en avenida San Martín y Villegas de Ramos Meja. Esa noche comenzó un periplo en casas de amigos hasta que la Embajada de Italia, en colaboración con religiosos de la iglesia católica, le facilitó la salida del país.
Desde Aeroparque a Montevideo , luego otro avión a Río de Janeiro; hubo temor a un secuestro.Y por fin desde Río de Janeiro a Roma.
Las organizaciones de derechos humanos y de trabajadores internacionales, donde la democracia cristiana tenía mucha influencia, lo enviaron a Alemania, España y Bélgica.
La Central de Trabajadores Latinoamericana (CLAT) lo invitó a Venezuela y Affatato comenzó sus actividades en la Universidad de los Trabajadores como instructor /docente. Con ese cargo participó en varios congresos internacionales como expositor.
Recorrió Peru, Bolivia, Brasil, Guatemala, Cuba y Nicaragua.
En ese sentido, participó junto al ex presidente de Brasil Ignacio Lula Da Silva en aquellos congresos organizados por la CLAT.
Ya en 1983 decidió volver con la democracia a su querida Matanza.
El periodista Juan Andrés Paulenko, quien fue su vocero de prensa fue candidato a intendente en 1991. La carrera política de Affatato siguió en 1995 al consagrarse primer concejal de la lista del Frente Grande junto a Luis D’elía y Herminio Bayón. También escribió su testimonio en su libro denominado «Dos Décadas y una Yapa». En 1997.
Entre sus iniciativas, fue el primer dirigente en presentar el proyecto y generar el debate sobre la división de La Matanza en el HCD.
«Se fue un dirigente social muy amigo de monseñor Rodolfo Bufano (ex obispo de La Matanza) y del ex obispo de Morón, monseñor Justo Laguna. Todos quienes lo conocímos lo vamos a recordar con mucha emoción y afecto. Quedará en la memoria las largas charlas sobre la polìtica, el país y la vida», concluyó Paulenko.
EL RECUERDO DEL RUSO GDANSKY
El ex secretario general de la UOM Seccional La Matanza y amigo de siempre, Carlos Enrique “El Ruso” Gdansky así lo recordaba en nuestro programa “Pedro Artaza y sus Noticias”.
“Carmelito era ante todo una buena persona, de honra. Transmitía una gran tranquilidad y dedicó gran parte de su vida como delegado en la fábrica Martín Amato, de Lomas del Mirador, que luego fue Lucas Indiel, de capitales ingleses que después cerró, donde formó parte de la Comisión Interna junto al compañero Emilio Tomasín. Un obrero de Santa Rosa desaparecido en 1977 por la Dictadura Militar.
“Una historia muy linda que vivimos con Carmelito fue cuando los dos fuimos elegidos como delegados activistas, él por Lucas Indiel y yo por Santa Rosa y viajamos en 1984 a un Coloquio de la Iglesia y los Trabajadores en Venezuela, con Monseñor Rodolfo Bufano, Laguna, de Morón y otros dos Obispos de la zona oeste donde intercambiamos muchas experiencias. Fijate que era muy gracioso en Matanza porque a Carmelito lo tildaban de comunista, de guerrillero y él era profundamente católico con importantes relaciones con la Curia y pertenecía a la Democracia Cristiana”, nos refiere el ex secretario general de la CGT matancera.
Y sigue recordando Gdansky: “Lo más lindo para recordar a los compañeros que se nos van son las anécdotas. Carmelo enseñaba catecismo a los pibes que iban a tomar la comunión. Y una vez hubo una gran movilización de metalúrgicos en San Justo (en la época de López Rega) cuando habían intervenido la Regional de Villa Constitución. La policía se llevó detenido a Carmelito a la 1ra. De San Justo”.
“A la noche, durante la cena en su casa, el Comisario recibió las críticas de su hija porque había encerrado a Carmelo, que era una buena persona y la estaba preparando, precisamente para la Comunión. Son esas cosas que le pasan a los hombres cuándo los tildan de algo que no son… Y lo otro que me quedó en la momeoria y el corazón fue cuando él y Hernán Bernasconi me acompañaron a la primera reunión que tuve con el compañero Lorenzo Miguel, después que en 1984 ganamos la UOM de La Matanza.