El sábado por la noche, el joven colega Pablo Bodego fue agredido, golpeado y brutalmente por policías de la Comisaría de La Tablada. Bodego estaba cumpliendo con tarea profesional, grabando los detalles de la represión a gente que había ocupado unos terrenos en el barrio San Martín (ex La puñalada), ubicado junto a las vías de los ferrocarriles Belgrano Sur y Roca, a pocas cuadras de Boulogne Sur Mer.
Fue detenido e incomunicado luego de quitarle todos sus elementos de trabajo, documentación personal y hasta la motocicleta, con la que se desplaza por La Matanza para el trabajo periodístico como director editor del medio “Tapiales hoy”. Fue acusado de “Tentativa de usurpación”, “resistencia a la autoridad” y “Lesiones”. Un claro y brutal caso de violencia policial contra la libertad de prensa,
El lunes siguiente, dialogamos con su esposa Silvina en nuestro programa “Pedro Artaza y sus Noticias” (AM 930 NATIVA en dúplex con AM 1250 ESTIRPE NACIONAL), quien nos relató la odisea de su esposo, quien salió de su detención el domingo por la tarde de acuerdo a un Oficio de Libertad del Juzgado de Garantías N° 5 del Departamento Judicial de La Matanza-
–Pablo está en casa por suerte, dolorido y angustiado por todo lo que pasó. Los efectivos que lo golpearon son de la Comisaría de La Tablada, pero como había muchos móviles, no sabemos si hubo policías de otros lugares. Lo averiguaremos porque en ningún momento se identificaron, incluso con nosotros en la misma comisaría cuando fuimos a buscarlo, comienza explicando la joven señora.
–¿Ellos fueron los que actuaron entonces?
–Lo detuvieron ahí pero después lo trasladaron a la Comisaría de Villa Madero. Y lo llevaron a una revisación médica, lo que nosotros no supimos porque no nos daban información sobre Pablo. Nos maltrataron a mi cuñado y a mí cuando fuimos a pedir información. Nos pedían que nos retiráramos.
“ESTÁN OCULTANDO MUCHAS COSAS”
–¿Por lo que nos contás, inferimos que estaban ocultando algo ya que fue un atropello, fueron directamente a golpearlo?
–Están ocultando muchas cosas. Más allá de la cuestión política de esa toma de terrenos, según nos informaron, también nos dijeron textualmente que “Pablo no tenía que estar en ese lugar”, sin darnos mayores explicaciones. Queremos saber la verdad, porque sufrimos mucho, nos parecieron eternas esas 24 horas.
–Eso de que no podía estar allí es una mentira, porque ya sea político de un lado u otro, en el video que vimos hay gente que dice y muestra que tienen papeles de esos terrenos mientras otros vecinos los quieren expulsar. Eso no quiere decir que Pablo, como cualquier otro periodista tenía prohibido estar en el lugar documentando la represión, los disparos y todo lo que se advierte en la grabación, Silvina…
“GENTE DEL MUNICIPIO QUE DEBÍA AYUDARNOS, NO LO HIZO”
–Había vecinos que pedían que fueran a registrar lo que estaba pasando. Habían llamado a Canal 26, pero comentaban que la policía no quería que se acercaran los medios. Y quiero aclarar que yo no estoy a favor de las tomas de terrenos. No sé cuál es la cuestión política pero ahora quiero conocerla porque nos afectó a nosotros. Pablo no sólo es periodista, también está haciendo un trabajo social con el comedor del Galpón Cultura de Tapiales.
Y continúa Silvia: “No nos dieron respuesta. Porque cuando llamamos a gente que creíamos que podían ayudarnos para solucionar la situación de Pablo, nadie nos respondió”.
–¿Y quiénes son esas personas que podían haberlo ayudado en esta situación tan fea, son del Municipio?
–Sí, son altos funcionarios del Municipio de La Matanza. Llamaron mi familia y muchos vecinos que se enteraron, trataron de ayudarnos. Nos pusieron en contacto con Derechos Humanos de Provincia de Buenos Aires y Madres del Dolor. La policía lo había involucrado a Pablo con la toma y él sólo estaba trabajando. Estaba transmitiendo en vivo lo que estaba pasando y todos vimos lo que le hicieron. Después nos llegaron videos de vecinos que también mostraron lo que pasaba con él detrás de cámara, explica con detalles la esposa de Bodego.
“Cuando acudimos a esa gente del municipio nos dijeron que la situación judicial excedía lo político y que ya no podían hacer nada. Ellos saben del trabajo social que está haciendo mi esposo y lo mínimo que esperábamos era que se solidaricen y hagan algo por él”, dispara la señora, evidentemente dolida por el abandono.
Lo que molesta de esta situación es la indiferencia que hubo por este tremendo ataque a un periodista, a la libertad de prensa. Porque un gomazo en la cabeza de Pablo Bodego, de “Tapiales Hoy” pudo haber terminado mal. Y eso nos puede pasar a cualquiera de los periodistas que vamos a cubrir hechos como éste del barrio San Martín u otros. Por eso nuestro enojo por los brutales policías de La Tablada y nuestra solidaridad con el colega Pablo Bodego, lo que también expresaron otros periodistas que se enteraron.
¿Quiénes y por qué no querían que hubieran medios? Después nos enojamos cuando viene TN a buscar esas malintencionadas notas para dejar mal parada a La Matanza, como si fuera el ‘quinto infierno’ de la inseguridad. Que se investigue. Por la libertad de prensa, primero. Por el respeto al trabajador y al ser humano, principalmente.
PEDRO ARTAZA