Han pasado 47 años donde un gobierno constitucional, elegido democráticamente por casi un 64 por ciento de los votos fuera derrocado por la dictadura militar.
La Presidenta María Estela Martínez de Perón, “Isabelita” para el General Perón y su pueblo. Cundo la encarcelan, había un Estado sin deuda interna, la deuda externa al 25 de mayo de 1973 era de 5.289 millones de dólares, al 24 de marzo de 1976, seguía siendo de 189 millones de dólares, con los intereses pagos. Un progresismo que fue actor principal en la teoría de los dos demonios, se estaba preparando para el derrocamiento.
La compañera Isabel gobernó en un concierto geopolítico mundial donde se enfrentaba a operaciones externas e internas. Así y todo, tuvieron que derrocarla, porque sabían muy bien que el peronismo volvería a ganar las elecciones del ´76.
Las nuevas generaciones peronistas tienen que saber, que el gobierno peronista de la compañera Isabel a pesar de las traiciones internas, nacionalizó las bocas de expendio, suspendió el negociado de la producción siderúrgica en manos de Minerao Borumbarense Teunida de Brasil.
Suspendió el negociado de Valores Internos y Externos, implementado el profesionalismo militar, integrado por la Nación, bajo la responsabilidad del Coronel Damasco y el General Ernesto Fatigatti.
Se sancionó la Ley 20.744 de Contratos de Trabajo, aún vigente; se aprobó la Ley de Asociaciones Profesionales y los mejores Convenios Colectivos de Trabajo- Se interceptó el armamento destinado a la guerrilla, enviado desde Gran Bretaña (16.000 proyectiles con armamentos de alta tecnología para su época). Ordenó el cañoneo a una nave británica el 4 de febrero de 1976 por incursionar en aguas territoriales argentinas.
El Proceso de Reorganización Nacional fue la dictadura más siniestra y preparada de nuestra historia, donde se ensañó con una mujer, primer Presidenta de los Argentinos, presa por 5 años, sin causa alguna y un pueblo que siempre quiso y querrá ser soberano.
La verdadera historia no se silencia.
ORLANDO BENAVÍDEZ – Secretario de Organización
PABLO BOSCHI – Secretario General