El ex secretario de Cultura de la Nación del macrismo, Pablo Avelluto, se refirió a la conquista de la Selección Argentina y protagonizó un brutal y vergonzoso ataque contra Diego Maradona y el kirchnerismo. Sus dichos recuerdan un título del escritor noruego Henryk Ibsen: “Un enemigo del pueblo”, porque también denuncia al capitalismo pero sin el sarcástico talento de aquél…
Pablo Avelluto realizó un repudiable comentario en las redes sociales. El ex secretario de Cultura de la Nación durante el gobierno de Mauricio Macri protagonizó un papelón y atacó tanto a Diego Maradona como al kirchnerismo luego de la conquista de la Selección Argentina en el Mundial de Qatar 2022.
El también editor del último libro de Macri utilizó su cuenta de Twitter (@pabloavelluto) para reaccionar a los festejos y celebraciones de la tercera Copa del Mundo que la Argentina consiguió con Lionel Messi como capitán del equipo que comanda Lionel Scaloni. «La maradonización del éxito deportivo es la herramienta vil del kirchnerismo para apropiarse de un triunfo que les es ajeno», expresó, tratando de politizar la consagración nacional.
Como si fuera poco, y consciente que la muerte de Maradona se produjo el 25 de noviembre de 2020, Avelluto lanzó otro insólito comentario en las redes: «Quédense con sus muertos. Nosotros celebramos con los vivos». Inmediatamente después, el ex funcionario macrista recibió una ola de críticas y comentarios cuestionando sus dichos.
CONTRA LOS TRABAJADORES DE YPF, TÉLAM
Pablo Avelluto se refirió además a una eventual privatización o cierre de algunas empresas estatales como la petrolera YPF o la agencia de noticias Télam, avisando que «algunos tendrán que buscar trabajo de otra cosa».
En este marco, el exfuncionario de Cambiemos afirmó que «hay que revisar el componente deficitario de muchas empresas y el aporte del servicio que prestan en relación a lo que nos cuesta a todos los argentinos».
Y TAMBIÉN AEROLÍNEAS ARGENTINAS
En el caso de Aerolíneas Argentinas, este desaprensivo que dice defender “la cultura”, destacó que «cumple una función política y sin dudas hay que unir localidades que tal vez comercialmente no sean rentables». Sin embargo, planteó que «esto no implica que necesariamente tengamos que absorber todo el déficit de Aerolíneas y sus conductas monopólicas en relación a la posibilidad de competir con otras compañías que te cobran un pasaje más barato porque tienen menores costos». Me cago en la soberanía de un país, sr. Avelluto.
«Tenemos que dar la posibilidad de discutirlo. No creo que la soberanía nacional pase por una compañía. Lo que no podemos es seguir diciendo que porque hay gente que trabaja allí no modificar la realidad y seguir sosteniendo una empresa cuyos números de empleados no han hecho más que crecer con el correr de los años», precisó.
Como decíamos en el principio, parodiando al gran escritor Henryk Ibsen, es “Un enemigo del Pueblo”. Hay que denunciarlo…