El presidente Alberto Fernández encabezó en residencia de Olivos, el anuncio y lanzamiento del Programa de Fortalecimiento de Seguridad para la Provincia de Buenos Aires, que representará una inversión de 37.700 millones de pesos para la realización de obras de infraestructura, de transferencia de equipamiento y tecnología, y para la capacitación e incorporación de fuerzas de seguridad.
Fueron parte del acto el gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof; la Ministra de Seguridad Nacional, Sabina Frederic; y de Seguridad de la Provincia, Sergio Berni; el director de Gendarmería Nacional, Andrés Severino, y los intendentes Fernando Espinoza (La Matanza); Jorge Macri (Vicente López); Mariano Cascallares (Almirante Brown); Juan José Mussi (Berazategui); Juan Zabaleta (Hurlingham) y Juan Andreotti (San Fernando).
Se comunicaron por videoconferencia con el Jefe de Estado los intendentes de San Isidro, Gustavo Posse; Quilmes, Mayra Mendoza; y Merlo, Gustavo Menéndez.
MÁS POLICÍAS Y GENDARMES
El Megaplan de Seguridad para el conurbano bonaerense implica 10.000 nuevos policías que se formarán en universidades en los diferentes municipios; 2.200 nuevos móviles policiales; 3.000 Paradas Seguras en el transporte público); 12 nuevas Unidades Carcelarias y 4.000 nuevos efectivos de Gendarmería Nacional en el Gran Buenos Aires.
El Convenio con la Provincia incluye transferencia de 10 mil millones de pesos para adquisición de equipamiento de seguridad como chalecos antibalas, cámaras de seguridad, armamento, municiones y tecnología analítica aplicada.
Otros 3.780 millones de pesos serán ejecutados desde el Ministerio de Seguridad nacional para poner en marcha el Plan Centinela 2, una reedición del programa de seguridad que, en 2010, había lanzado la entonces Presidenta Cristina Fernández de Kirchner y que implicó el desembarco de gendarmes en el Conurbano. Ahora, serán 3.957 los efectivos de las fuerzas federales que se sumarán al patrullaje en las calles, lo que, según el Jefe de Gabinete Nacional Santiago Cafiero, implicará un refuerzo de «cien por ciento» con respecto a los que ya prestan servicio en los 24 distritos del Conurbano desde fines de julio.
MÁS DETALLES SOBRE EL PLAN
Se busca descomprimir las saturadas comisarías bonaerenses, que hoy alojan a 5.471 de los 48.565 detenidos del total en la Provincia, el Ministerio de Obras Públicas nacional dispondrá de 12.800 millones de pesos, con los que se construirán dos nuevas unidades penales con capacidad para alojar a mil detenidos cada una y diez nuevas alcaidías para 3.000 reclusos en total.
NUEVAS CÁRCELES Y BOTONES ANTIPÁNICOS
Con otros 3.234 millones de pesos, se empezará a construir un penal federal en Mercedes y se destinarán 1.425 millones más para construir 19 centros de aislamiento sanitario por COVID-19 para detenidos, algunos de los cuales ya empezaron a levantarse en 14 municipios. Los 3.072 millones de pesos restantes que administrará Gabriel Katopodis irán a la refacción de 96 comisarías de los 24 distritos alcanzados.
Y por su parte, el Ministerio de Transporte nacional invertirá 3.370 millones de pesos para instalar 4.000 «paradas seguras» que contarán con cámaras de seguridad conectadas con los centros de monitoreo distritales y botones antipánico que permitirán dar aviso a las fuerzas de seguridad ante hechos delictivos. A futuro, una vez que las medidas de aislamiento por la pandemia se levanten, el plan prevé sumar 10.000 nuevos policías bonaerenses que, a lo largo de 18 meses, se formarán en academias descentralizadas que funcionarán en los diferentes municipios.